Axis Mundi: El súper–soldado, más allá del cine y los cómics


Hace unas semanas, el gobierno británico anunció el establecimiento de la Agencia de Investigación e Invención Avanzada (ARIA, por sus siglas en inglés),[i] financiada por los contribuyentes y dotada con un presupuesto de 800 millones de libras. Ideada por el ex–asesor principal del primer ministro británico, Dominic Cummings, y siguiendo el modelo de la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzada de Defensa de Estados Unidos, DARPA (a la que debemos, entre otras cosas, el desarrollo del internet),[ii] la organización británica se centrará en algunos aspectos de la tecnología genómica,[iii] la cual se está convirtiendo en una parte cada vez más importante de la investigación militar.

Así que, dado que el Reino Unido cuenta con algunos de los mejores centros de investigación genómica del mundo, resulta pertinente preguntarnos: ¿cómo afectará su nueva agencia a la carrera armamentística genómica que está librándose a nivel mundial?

En 2019, DARPA anunció que deseaba explorar la edición genética de soldados, al tiempo que invertía más de 65 millones de dólares para mejorar la seguridad y la precisión de las tecnologías de edición genómica, entre ellas, la famosa «tijera molecular» Crispr–Cas, ganadora del premio Nobel, una herramienta que puede editar el ADN cortando y pegando secciones del mismo.[iv] Pero la facilidad de acceso y el bajo costo de las tecnologías basadas en Crispr han provocado la preocupación por los efectos de una posible modificación genética militar y la creación de bio–armas basadas en virus o bacterias —como la viruela o la tuberculosis— que podrían ser extremadamente destructivas.

Obviamente que Estados Unidos no está solo en su búsqueda militar de la tecnología genómica: Rusia y China han afirmado —o han sido acusadas— que emplean dicha tecnología para mejorar sus capacidades militares.

Como bien saben nuestros lectores, Soldado Universal (1992) y Capitán América: el primer vengador (2011) son sólo algunas de las películas de Hollywood que han explorado el concepto del super–soldado y, a pesar de su carácter de ciencia ficción, varios países de hecho están explorando el potencial de tales escenarios, por ejemplo, DARPA pretende explorar la edición genética en soldados para convertirlos en «fábricas de anticuerpos», haciéndolos resistentes a ataques químicos y/o biológicos.[v]

En diciembre de 2020, el entonces director de Inteligencia Nacional de Estados Unidos, John Ratcliffe, señaló que existían pruebas de que el ejército chino estaba llevando a cabo experimentos con humanos en un intento de potenciar biológicamente a sus soldados,[vi] afirmación que siguió a un informe del thinktank de política, Jamestown, el cual destacaba los datos que sugerían que Crispr formaría parte de una tecnología clave en China para «aumentar la eficacia de las tropas en el combate», aunque no se dieron más detalles.[vii]

Sin embargo, no todos los países están dispuestos a utilizar la edición de genes o incluso la tecnología genómica para mejorar a sus tropas: el comité de ética militar francés aprobó recientemente una investigación sobre el «perfeccionamiento» de sus soldados, es decir, implantes que podrían «mejorar la capacidad cerebral».[viii] No obstante, el comité advirtió que no se podían cruzar ciertas líneas rojas, como la edición del genoma o la eugenesia.[ix] En palabras más sinceras de la ministra francesa de las Fuerzas Armadas, Florence Parly, esto equivale a «un sí a Iron Man, pero un no a Spiderman» —recordemos que, en los comics y las adaptaciones fílmicas, Tony Stark obtiene sus habilidades de una armadura de alta tecnología, mientras que Peter Parker es mordido por una araña radiactiva (o modificada genéticamente en las versiones más recientes)—.

Por otra parte, en Rusia, el ejército está estudiando la posibilidad de implementar «pasaportes genéticos» en su personal, lo que permitiría evaluar las predisposiciones genéticas y los biomarcadores, por ejemplo, de tolerancia al estrés, lo cual podría ayudar a poner a sus tropas en las líneas militares adecuadas, como la marina, la fuerza aérea, etcétera. El citado proyecto asimismo pretende comprender cómo responden los soldados a las situaciones de reales de combate, tanto física como mentalmente.[x]

En este sentido, hay indicios de que el Reino Unido será más audaz y menos transparente en su investigación genética militar que muchos otros países, por ejemplo, ARIA no estará sujeta a solicitudes de libertad de información, en contraste con DARPA. Recordemos que Gran Bretaña también ha estado a la vanguardia en la implementación de tecnologías genómicas no militares controvertidas y pioneras, como los bebés de tres padres (técnica puesta en práctica en México, debido a la facilidad con la que todo mundo viola la ley en nuestro país, algo que retoma de forma excelente la última y magnífica cinta sobre Wolverine, Logan),[xi] al tiempo que no han faltado informes gubernamentales que destacan la importancia de la tecnología genómica en el ámbito de la defensa y la seguridad.

En efecto, durante 2015, una revisión de la defensa nacional del Reino Unido destacó la influencia que los avances de la ingeniería genética pueden tener para «la seguridad y la prosperidad», circunstancia que el gobierno británico acaba de reafirmar este 2021.[xii] De hecho, la propuesta de no rendir cuentas de ARIA, combinada con el objetivo gubernamental de que la tecnología genómica se extienda a las aplicaciones de seguridad y defensa, creará un foco de debate y discusión, por ejemplo, durante los últimos años, los científicos británicos han recibido financiación de DARPA para investigaciones genómicas controvertidas, a saber, la extinción genética de especies invasoras, como mosquitos o roedores.[xiii] A pesar de sus resultados prometedores, tales técnicas podrían tener un potencial desastroso para dañar la seguridad alimentaria y amenazar los ecosistemas más amplios de las naciones.

En conclusión, el despliegue de la tecnología genómica debe gestionarse de forma universal, ética y científicamente sólida. Si no es así, el potencial de una nueva carrera armamentística por los avances en esta investigación sólo conducirá a soluciones más radicales y potencialmente peligrosas, tal y como lo han señalado desde hace décadas los comics y las películas sobre la búsqueda por desarrollar al super–soldado, donde destacan obras maestras como Arma–X (Barry Windsor–Smith, 1991), Global Frequency (Warren Ellis, 2002–2004) y Upgrade: máquina asesina (Leigh Whannell, 2018).

 

Notas de referencia:

[i] https://www.gov.uk/government/publications/advanced-research-and-invention-agency-aria-statement-of-policy-intent/advanced-research-and-invention-agency-aria-policy-statement

[ii] https://www.darpa.mil/about-us/about-darpa

[iii] https://www.genome.gov/es/About-Genomics/Introduccion-a-la-genomica

[iv] https://www.youtube.com/watch?v=UaxrYWCyLdY

[v] https://www.defense.gov/Explore/News/Article/Article/1969741/darpa-director-talks-promise-of-life-sciences-research/

[vi] https://www.nbcnews.com/politics/national-security/china-has-done-human-testing-create-biologically-enhanced-super-soldiers-n1249914

[vii] https://jamestown.org/program/chinas-military-biotech-frontier-crispr-military-civil-fusion-and-the-new-revolution-in-military-affairs/

[viii] https://www.bbc.co.uk/news/world-europe-55243014

[ix] https://www.teseopress.com/mejoramientogenetico/chapter/la-eugenesia/

[x] https://www.forbes.com/sites/zakdoffman/2019/06/08/russias-new-genetic-military-passports-will-sort-the-fighters-from-the-thinkers/?sh=631dce302a6e

[xi] “’Lo más extraño me parece que se haya realizado en México, ya que por el momento solo es legal en Reino Unido, y aun así allí todavía no le han dado la licencia. Si se hubiera hecho algo así en España, los médicos hubieran ido a la cárcel’, añade Julio Montoya, de la Universidad de Zaragoza”, https://elpais.com/elpais/2016/09/27/ciencia/1474989059_678680.html.

[xii] https://www.gov.uk/government/publications/global-britain-in-a-competitive-age-the-integrated-review-of-security-defence-development-and-foreign-policy

[xiii] https://www.theguardian.com/science/2017/dec/04/us-military-agency-invests-100m-in-genetic-extinction-technologies

 

Carlos Hinojosa**

**Escritor y docente zacatecano

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