RÍO GRANDE. De poco, o tal vez de nada, han servido los pronunciamientos de los legisladores zacatecanos, la intervención de la Procuraduría de protección al medio ambiente y el anuncio del gobierno municipal de que invesrigaría la situación, pues en Río Grande siguen muriendo perros y gatos por envenenamiento.
En los últimos ocho días, que han coincidido en el período en el que la Secretaría de Agua y Medio Ambiente (SAMA) revisó este problema social, se ha registrado la muerte de ocho perros y gatos.
Se desconoce si se trata de nuevas muertes o los remanentes de la ola de envenenamiento simultáneo que dejó más de 100 perros muertos, callejeros y con dueño, en esta municipalidad.
De acuerdo a registros de asociaciones activistas de protección de perros y gatos, algunos de los animales que han sido muertos por envenenamiento han sido encontrados la calle Abasolo, colonia Tepeyac.
Las señoras Teresa Mendoza y Daryela Rojas han pedido cada una dos gatos por envenenamiento.
Asociaciones animalistas están pidiendo a dueños de perros que estén al pendiente de sus mascotas y eviten que anden sueltas en las calles, pues ante el brote de muertes de perros corren el riesgo de ingerir el veneno.
Del mismo modo demandan a las autoridades de gobierno que no den ”carpetazo” al tema y continúen las investigaciones para determinar las causas de muerte de tantos perros y gatos.
Carlos Triana / Tropicozacatecas.com