Es 1980 y tengo casi diez años, en el cine veo un filme de fantasía repleto de espadas, barcos y monstruos, algunos de metal, otros prehistóricos y algunos procedentes del infierno: criaturas de la imaginación que cobran vida con un realismo aterrador en la pantalla que tengo en frente, criaturas que hicieron estallar mi mente. La película era Simbad y el ojo de tigre (1977), mi introducción al maravilloso mundo del animador y cineasta Ray Harryhausen (1920–2013).
Bien puedo afirmar que, después de 40 años, dicho filme, con los incomparables efectos stop–motion de Harryhausen, aún sigue maravillándome, al tiempo que fue uno de los primeros momentos en que comencé a ser consciente de las sincronicidades:[i] recién había leído, en la legendaria revista Duda,[ii] sobre los hiperbóreos[iii] y he aquí que, en la película, su civilización desparecida jugaba un rol crucial. Tal vez de ahí nació mi obsesión con la cultura que nuestra especie pudo haber perdido en la Última Glaciación, en la catástrofe que hoy conocemos como «Younger Dryas Boundary»,[iv] la cual parece ser el origen del mito del Diluvio Universal, presente en casi todas las culturas antiguas.[v]
Regresando con el maestro Ray Harryhausen, su increíble labor aportó geniales efectos especiales en películas de ciencia ficción y fantasía, desde el gorila de Mighty Joe Young (1949) hasta Pegaso, el corcel volador, en la versión original de Furia de Titanes (1981). Platillos voladores, dinosaurios, animales reales y extintos, además de varios monstruos y criaturas míticas, es innegable que Harryhausen logró dar vida a una diversidad de secuencias fílmicas en formas que pocos contemporáneos podrían igualar, y todo antes de la existencia de las CGI (Imágenes Generadas por Computadora), la herramienta de animación que se usa (y abusa) hoy en día.
Una pléyade de genios de los efectos especiales contemporáneos señalan a Harryhausen como su influencia, incluyendo a Steven Spielberg, George Lucas, Peter Jackson y Guillermo del Toro;[vi] pero, sobre todo, Harryhausen es muy querido por un grupo demográfico particular, el cual creció viendo sus criaturas en el cine y la televisión, un grupo especial que incluye el corazón (y las mentes) de un buen número de zoólogos, paleontólogos y otros profesionales con un interés científico en la biomecánica y la anatomía comparativa. Por ejemplo, el paleontólogo especialista en pterosaurios, Mark Witton,[vii] el zoólogo y experto en tiranosaurios, Dave Hone,[viii] y el biomecánico evolutivo, John Hutchison.[ix]
Harryhausen poseía una gran imaginación, pero también un buen ojo y cerebro para el realismo. Hizo que los animales interactuaran con la gente en la pantalla de maneras imposibles de lograr con los especímenes reales. Sus interpretaciones del elefante en el Valle de Gwangi (1969),[x] el cangrejo en la Isla Misteriosa (1961)[xi] y el babuino en la citada Simbad y el ojo de tigre[xii] resultan increíbles en su representación.
En cuanto a las criaturas extintas que resucitó, tenemos a un tigre dientes de sable y un mamut lanudo. Por supuesto, también hubo dinosaurios y otros reptiles gigantes prehistóricos, incluyendo los pterosaurios, uno de los cuales se llevó a una voluptuosa Raquel Welch, vestida con un bikini de pieles, en Un millón de años A.C. (1966).[xiii]
Además, Harryhausen realizó verosímiles platillos voladores alienígenas, así como todo tipo de monstruos y criaturas: un cíclope, Medusa, el Kraken y los hijos de los dientes de la Hidra, un ejército de esqueletos espadachines, uno de los momentos más icónicos del cine, secuencia retomada incluso por el grupo de rock The Killers, para su video del tema Bones (2006).[xiv]
Harryhausen prestaba una gran atención a los detalles, junto con una paciencia desmesurada, por ejemplo, le llevó cuatro meses y medio animar la citada secuencia de la pelea de esqueletos en Jasón y los argonautas (1963, disponible en Netflix), que se desarrolla en sólo cuatro minutos y medio en tiempo real dentro de la película.[xv]
No cabe duda que Harryhausen actuaba como lo hacen los anatomistas modernos, tratando de entender cómo funcionan los cuerpos de los animales (en términos de huesos, músculos y otros tejidos blandos), con el fin de emplear dicha comprensión para re–imaginar criaturas extinguidas, tal y como lo realizan los paleontólogos contemporáneos. Ray se esforzaba por recrear no sólo el aspecto de un dinosaurio —u otras criaturas extintas—, sino también cómo se desplazaba, qué sonidos emitía y cómo interactuaba con su entorno y otros seres dentro de éste.
Aunque Harryhausen es más conocido por sus modelos en 3D que, a pesar de su diminuto tamaño, a menudo eclipsaban y superaban a los actores humanos dentro de las películas de ciencia–ficción y fantasía que realizaba, Ray asimismo producía bocetos de storyboard y dibujos clave para vender sus ideas a los estudios de cine. Estilísticamente, el arte conceptual en 2D[xvi] de Harryhausen parece influido por artistas como el ilustrador Gustave Doré,[xvii] el arquitecto y pintor Joseph Gandy,[xviii] así como en el retratista de la vida salvaje y paleoartista Charles Knight:[xix] su encuadre, composición y detalles anatómicos reflejan tales influencias. Por otro lado, su inspiración para elaborar maquetas y maniquíes procede de Willis O’Brien, quien creó el King Kong original;[xx] según la leyenda, Harryhausen fue a ver la película de King Kong (1933) 33 veces en el cine de su localidad.
Bien podemos afirmar que Harryhausen fue uno de los primeros cineastas en dar vida a criaturas extintas (e imaginarias) en la pantalla, por lo tanto, tendió un puente entre la ciencia y las artes, inspirando tanto a los futuros científicos como a la siguiente generación de cineastas. Por ende, no hay mejor homenaje para este genial titán del Séptimo Arte, en un inefable 2020 que señala el centenario de su nacimiento, que volver a maravillarse, como cuando éramos niños, con sus sorprendentes creaciones.
Notas de referencia:
[i] https://hipertextual.com/2015/10/sincronicidad-la-ciencia-las-coincidencias#:~:text=En%201952%2C%20Carl%20Jung%20acu%C3%B1%C3%B3,su%20relaci%C3%B3n%20es%20de%20contenido.
[ii] http://coleccionrevistasduda.blogspot.com/
[iii] https://dialnet.unirioja.es/descarga/articulo/148849.pdf
[iv] https://cometresearchgroup.org/comets-diamonds-mammoths/
[v] https://www.divulgameteo.es/uploads/Diluvio-Universal-leyendas.pdf
[vi] https://revistareplicante.com/jason-y-el-dueno-de-la-chistera/
[vii] https://markwitton-com.blogspot.com/2013/05/ray-harryhausen-1920-2013.html
[viii] https://www.theguardian.com/science/lost-worlds/2013/may/16/dinosaurs-on-film-ray-harryhausen
[ix] https://whatsinjohnsfreezer.com/2018/06/23/hurry_hausen/
[x] https://www.youtube.com/watch?v=3A6tNff9y98&ab_channel=InfernoRodan
[xi] https://www.youtube.com/watch?v=EzFLvR4TaOI
[xii] https://www.youtube.com/watch?v=a8-HGV-9r60&ab_channel=KarlMagnusEriksson
[xiii] https://www.youtube.com/watch?v=OKCTPSY6lf4&ab_channel=apollomovieguy
[xiv] https://www.youtube.com/watch?v=FufL80hJsP8
[xv] https://www.youtube.com/watch?v=T-FOQ4rgGpU
[xvi] https://www.nationalgalleries.org/art-and-artists/features/art-and-ray-harryhausen
[xvii] https://www.wikiart.org/es/gustave-dore
[xviii] https://www.tate.org.uk/art/artists/joseph-gandy-11125
[xix] http://www.charlesrknight.com/
[xx] https://kingkong.fandom.com/wiki/Willis_O%27Brien
Carlos Hinojosa*
*Escritor y docente zacatecano