Mazapil, Zacatecas.- A quien conoce el relieve del territorio de Zacatecas le resultaría inverosímil creer que en el semidesierto hay una zona donde el agua potable que bebe la gente es de las más puras del estado.
Y es que esta duda se fundamenta en el hecho de que los mantos acuáticos del subsuelo de esta región desértica de Zacatecas están cargados de metales y minerales.
Sin embargo, la mayoría desconoce la existencia de que en medio de planicies cubiertas de tierra blanca hay cuatro plantas potabilizadoras que garantizan el abastecimiento del vital líquido a habitantes de la zona rural de Mazapil.
Esta acción es posible gracias a una inversión millonaria que realizó el consorcio Newmont, que opera Minera Peñasquito, mismo que diariamente trata y garantiza miles de litros de agua para su distribución entre unas 2 mil 500 personas.
“Tener el agua potable es una bendición”
Martha es una mujer ama de casa. Su esposo Miguel es uno de los choferes que manejan camiones de carga que sacan metales de Minera Peñasquito.
Por un común acuerdo con su pareja, ella se encarga de las labores del hogar. Lavar ropa y los trastes, barrer, trapear e incluso darles agua y alimento a unos animales de traspatio son algunas de las labores de su día a día.
Vive en la comunidad Cedros, en Mazapil, donde hay alrededor de 200 viviendas habitadas, todas con el servicio de potable, que, además, es apta para el consumo humano.
Contar con el vital líquido de forma segura y sin contratiempos es fundamental para Martha, sobre todo porque tiene a su cuidado a dos hijos pequeños, a quienes debe tenerles su ropa limpia, sus alimentos y su vivienda en un ambiente de higiene.
“Desde que construyeron las plantas potabilizadoras, para nosotros es una bendición porque ya no nos hemos vuelto a preocupar por el agua y porque nos permite tenerla en el hogar ya sea de noche o de mañana”, refirió a Trópico de Cáncer Noticias.
La distribución del agua potable se realiza utilizando la misma red de abastecimiento que el poblado de San Juan de los Cedros ya tenía, mismo que está vinculado a cada toma domiciliaria.
Agua de calidad para el consumo humano
En los años 2018 y 2019, Minera Peñasquito realizó una inversión económica para construir plantas que garanticen el abastecimiento de agua potable en cinco comunidades donde el servicio del vital líquido era irregular
De acuerdo con los habitantes de cada localidad, se abastece diariamente a los habitantes de San Juan de los Cedros, Mesas del Portezuelo, Nuevo Peñasco, Palmas Grandes, Charcos y, también, se cubre el campamento de trabajadores de Minera Peñasquito.
En su conjunto, diariamente, las plantas potabilizan 629 metros cúbicos de agua, lo que significa un volumen de agua de 629 mil litros. Todo el proceso de purificación se basa en la norma mexicana NOM-127-SSA1-1996.
De acuerdo con el perfil tecnológico, cada planta potabilizadora tiene la capacidad de eliminar del vital líquido todo rastro de plaguicida, fertilizante, metales pesados, nitratos y fenoles.
Su funcionamiento se basa en un sistema de ósmosis, mismo que, además, retira los excedentes de sales en el agua; los filtros retienen olores y sabores. Todo ello la hace apta para el consumo humano.
Supervisión de la calidad del agua
El mantenimiento y supervisión de estas cuatro plantas potabilizadoras corre a cargo de la empresa Hydrocontrol Industrial, misma que permanentemente brinda capacitación en el manejo a los pobladores de las comunidades.
Omar Armando Navarro García es un supervisor de Hydrocontrol. Una de sus responsabilidades es que el agua potable no falte en ninguno de los hogares.
“El agua que llega a estas plantas proviene de pozos profundos o de pipas. Después de purificarla, la depositamos en una pileta donde se almacena y se mantiene lista para las necesidades de las comunidades”, explicó.
Por parte de Hydrocontrol y, también, de Minera Peñasquito, de forma aleatoria se realiza un monitoreo y análisis del agua ya potabilizada, de tal forma que haya certidumbre del vital líquido que se envía a los hogares.
A fin de que el agua no falle en las comunidades, se ha logrado una excelente coordinación con los pobladores, quienes tienen comunicación abierta, durante las 24 horas del día, para solicitarla”, refirió Armando Navarro.
Abastecimiento de agua, garantizado
Debido a la temporada de calor, en las viviendas de la zona conurbada Zacatecas-Guadalupe el estiaje y el tandeo traen con dolor de cabeza a las mujeres y los hombres que necesitan del agua para el uso diario.
Sin embargo, en el semidesierto de Zacatecas, a pesar de que, por las temperaturas, que ya rebasan los 30 grados centígrados en esta temporada de primavera y a que se ha incrementado el consumo del vital líquido, éste no faltará en los hogares.
Redacción / Tropicozacatecas.com