Tal vez los espectadores podríamos suponer que se trata del acto más descarado de marketing de los últimos tiempos, y sin duda una de las muestras más convincentes de «product placement» jamás vista en una película estadounidense,[i] pero una cosa es cierta: a pesar de todo, Air: la historia detrás del logo (2023), de Ben Affleck, es también una de las películas más divertidas en lo que llevamos del año. Protagonizada por su viejo amigo Matt Damon, Air, disponible ya en Amazon Prime Video, puede considerarse una oda al capitalismo tardío, disfrazada de drama deportivo a la vieja usanza de Hollywood.
Damon interpreta a Sonny Vaccaro, el ejecutivo de marketing de Nike que, a base de pasión y perseverancia, convenció a un novato Michael Jordan para que firmara un contrato con la empresa. En aquella época —estamos hablando de mediados de los 80’s— Nike tenía una cuota de mercado insignificante en básquetbol, un terreno dominado por sus rivales Adidas y Converse, aunque había acaparado el mercado del atletismo.[ii] Sin embargo, a pesar de que su empresa ya estaba valorada en mil millones de dólares, el empresario Phil Knight (Affleck) sólo estaba dispuesto a destinar 250,000 dólares a la división de baloncesto, para enojo de Sonny.
Sin suerte y con la presión del consejo ejecutivo aumentando poco a poco, Sonny se sienta una noche a ver un video de un adolescente jugando un partido colegial, y lo que descubre casi le hace caer del sillón: mientras que, prácticamente, todos los expertos habían descartado a Jordan por ser demasiado delgado para tener futuro en la NBA, Sonny —según la película— fue el único que se dio cuenta de su talento genial. Convencido de lo que ha descubierto, presiona a Phil Knight para que le deje perseguir la posibilidad de fichar a Michael Jordan para Nike, en un acuerdo «revolucionario» que cambiaría el curso de los negocios (y de la cultura) para siempre.
Air es una película que se enfoca en un momento muy concreto de la historia, al tiempo que da la impresión de que sus personajes han compartido un pasado y, probablemente, vivirán otras aventuras juntos en el futuro. Es el tipo de filme en el que actores de primera categoría interpretan papeles secundarios con la sinceridad y profesionalismo que, tal vez, aportarían al interpretar a Shakespeare. Por ejemplo, el engreído agente deportivo, interpretado por Chris Messina, existe sólo para crear obstáculos en el camino de nuestro protagonista, como el personaje de Jon Hamm en Top Gun: Maverick (Joseph Kosinski, 2022).
Air, asimismo, es el tipo de película en la que la gente en vez de coger el teléfono y decirle a alguien que han resuelto todos sus problemas, irrumpen en una oficina y pronuncian un discurso conmovedor, porque eso es más divertido de ver que una simple llamada telefónica, y el momento «¡eureka!» ocurre al detectar Sonny la grandeza de Jordan, cuando nadie más es capaz de hacerlo.
Después de su descubrimiento, Sonny irrumpe en la sede de Nike y expone apasionadamente sus planes. Al principio recibe críticas: Jordan no está en el radar de nadie, y gastar en él la cantidad de dinero que Sonny quiere parece, en el mejor de los casos, negligente y, en el peor, insensato. Pero así es exactamente como Affleck añade otra dimensión a una historia que, de otro modo, podría haberse convertido en una celebración de la codicia capitalista.
Junto con el debutante guionista Alex Convery, Affleck convierte hábilmente la búsqueda en el conflicto secundario de la película, ya que, ante todo, Air es un drama deportivo sobre la defensa del verdadero talento: Jordan en la cancha y Sonny en las salas de conferencias, a quien, al principio del filme, se le describe como «un gurú del baloncesto, un mago que va a muchos torneos colegiales».
Sonny no es muy distinto de un cazador de talentos, la única diferencia es que intenta fichar jugadores para una empresa, no para un equipo y, de acuerdo a la narración, aborda esta misión desde la pureza: no lo hace porque quiera hacerse rico, sino porque realmente cree en Jordan, en su potencial comercial, sí, pero también en su talento atlético.
Y, como espectadores, nos da gusto apreciar a Damon en estos papeles de hombre común, sobre todo porque verlos a él y a Affleck en pantalla es un viaje a la nostalgia que se suma al «regreso» a 1984, para quienes tuvimos la suerte de vivir esa época tan «loca y revolucionaria».
En este sentido, por muy preciso que sea Ben Affleck como director, la actuación de Damon desempeña un papel fundamental a la hora de convencernos de que Nike —una empresa valorada actualmente en más de 30,000 millones de dólares— es de alguna manera el desamparado del relato.[iii] No estamos ante una película biográfica, en la que nos interesa ver cómo un pobre tipo acosado acaba volviéndose rico, poderoso o ambas cosas; por ende, separar la situación actual de Nike de la del pasado resulta clave para disfrutar de este filme sin caer en el cinismo.
Además, resulta revelador que la primera película que recordamos mientras vemos Air sea Jerry Maguire – Seducción y desafío (Cameron Crowe, 1996), de hecho, algunos de los momentos más serios de la película parecen sacados directamente de otro drama de Cameron Crowe, Un zoológico en casa (2011), el cual, por cierto, también está protagonizado por Damon, en el papel de una persona normal que intenta salir adelante sólo con sinceridad. Así, resulta una prueba de su destreza para poner al público de su parte que, en una conversación con Viola Davis —quien interpreta a la madre de Jordan—, ella parezca la más calculadora de los dos.
Por todo lo anterior, al igual que el genial basquetbolista que nos ocupa, Air resulta ágil, aparentemente ligera y con la capacidad de mejorar en los momentos cruciales.
- Air: la historia detrás del logo se encuentra disponible en Amazon Prime Video
- Top Gun: Maverick puede verse en Star+
- Jerry Maguire – Seducción y desafío se encuentra disponible en HBOMax
- Un zoológico en casa puede verse en Disney+
REFERENCIAS
[i] https://gradomarketing.uma.es/?p=3525
[ii] https://tentulogo.com/nike-la-historia-de-una-de-las-marcas-mas-famosas-del-mundo/
[iii] https://eldiariony.com/2022/04/05/nike-sigue-siendo-considerada-la-marca-de-ropa-mas-valiosa-del-mundo/
Carlos Hinojosa*
*Escritor y docente zacatecano