Como bien saben los amables lectores, el próximo 26 de septiembre se cumplirán 10 años de uno de los episodios más trágicos y controversiales de la historia reciente de México: la desaparición de 43 estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa, «Raúl Isidro Burgos», en Iguala, Guerrero. A una década de distancia, ya todos somos conscientes de que este suceso no solo marcó a la sociedad mexicana, sino que también resonó a nivel internacional, generando indignación y cuestionamientos sobre el papel de todos los niveles de gobierno en la búsqueda de la verdad y justicia.
En el citado contexto, la plataforma de streaming MAX y HBO Latinoamérica (por el momento propiedad de Warner Bros. Discovery) estrenó, el pasado jueves 5 de septiembre, los primeros dos episodios de Los 43 de Ayotzinapa: un crimen de Estado, serie documental dirigida por el cineasta español Javier Ortiz, la cual ofrece un enfoque exhaustivo y bien argumentado de los eventos, presentando una narrativa que desmantela la «verdad histórica» establecida por el gobierno de del ex presidente Enrique Peña Nieto en torno al caso.
A lo largo de sus episodios, se presentan testimonios impactantes de familiares de los desaparecidos, expertos en derechos humanos, periodistas y personajes clave que participaron en la investigación, incluyendo gente que nunca había rendido su versión de los hechos frente a las cámaras, como la hija de José Luis Abarca, ex alcalde de Iguala que fue relacionado con la desaparición de los estudiantes, y el «siniestro» Tomás Zerón, ex director de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), prófugo de la justicia mexicana acusado de tortura y desaparición forzada, entre otros cargos, actualmente exiliado en Israel. De acuerdo con Javier Ortiz:
«Uno de los objetivos que nos marcamos desde el principio, viendo las obras audiovisuales que se habían hecho hasta el momento, era escuchar la voz de los funcionarios del gobierno mexicano que en su momento tuvieron que investigar el caso. Si tuviera que destacar algo es que estuvieron todas las voces […] que serían los sobrevivientes y gente protagonista que ha estado muy cerca y que ha vivido los hechos en primera persona».[i]
De esta forma, la serie muestra las irregularidades, omisiones, fabricación de culpables, «siembra de evidencias» y posibles encubrimientos por parte de las autoridades en todos los niveles del Estado, lo que lleva a señalar, horrorizado, a uno de los expertos del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes para Ayotzinapa (GIEI):[ii] «si esto ocurre en México con un caso de alto nivel nacional e internacional, ¿qué puede esperar un simple ciudadano acusado de cualquier delito?».
El documental utiliza una combinación de imágenes de archivo, entrevistas exclusivas, reconstrucciones visuales y videos poco difundidos para sumergir al espectador en la gravedad de los hechos, como en los que podemos ver al propio Tomás Zerón participando en la manipulación de una escena de delito y la impactante tortura de un sospechoso que culmina con algo que sólo habíamos presenciado en las películas policiacas.
Además, la cuidadosa edición y el uso de la música intensifican el sentimiento de dolor compartido e indignación, generando una conexión emocional con el público, sin la necesidad de emplear una voz en off que vaya encadenando las secuencias: son las propias imágenes las que refuerzan o desmienten, en cada caso, el testimonio de cada entrevistado, cuyas revelaciones resultan contundentes y significativas, presentando piezas de información y nuevos aspectos que habían sido ignorados o distorsionados en el discurso oficial, tanto del sexenio anterior como del presente, que ya toca a su fin.
Por otra parte, uno de los puntos más fuertes de la serie es su enfoque en la crítica social: no solo expone la violencia institucional, sino también las fallas sistémicas del Estado mexicano, desde la corrupción hasta la impunidad que ha permeado las investigaciones de casos de desaparición forzada en México, por ende, los padres y familiares de los 43 estudiantes, cuya lucha incansable ha mantenido el caso en la agenda pública, son presentados como los verdaderos héroes de esta historia.
Asimismo, el documental representa un grito desesperado por justicia y una llamada a la acción tanto para el gobierno como para la sociedad civil, en un país donde las desapariciones ya se han convertido en una catástrofe humanitaria,[iii] como actualmente sucede en nuestra entidad zacatecana.[iv]
De esta forma, la serie llega en un momento crucial, cuando la lucha por la verdad y la justicia sigue vigente, ya que, a pesar de los «esfuerzos» de la administración de AMLO por reabrir el caso y buscar nuevas líneas de investigación, los resultados han sido más que limitados.[v] Así, este documental sirve como un recordatorio de que la justicia aún no ha sido alcanzada y que la sociedad debe seguir exigiendo respuestas claras y responsables.[vi]
Como podemos apreciar, Los 43 de Ayotzinapa: un crimen de Estado es más que un documental: es un acto de denuncia y un llamado a la conciencia colectiva, una obra que debe verse no sólo por quienes buscan entender la profundidad de este caso, sino también por aquellos interesados en los desafíos contemporáneos de la democracia, la justicia y los derechos humanos en México. Con una narrativa poderosa, datos contundentes y un enfoque investigativo riguroso, la serie de MAX se posiciona como un documento esencial para entender la crisis de derechos humanos en nuestro país y el impacto de la impunidad que todos estamos padeciendo.
- Los 43 de Ayotzinapa: un crimen de Estado se transmite en la plataforma MAX, con un episodio nuevo cada jueves a las 21 horas, presentando su capítulo final el 26 de septiembre, para conmemorar los 10 años de esta tragedia.
[i] https://www.infobae.com/mexico/2024/09/01/la-desaparicion-de-los-43-normalistas-de-ayotzinapa-llega-a-max-en-una-nueva-serie-documental/
[ii] https://articulo19.org/giei-presenta-su-sexto-y-ultimo-informe-sobre-el-caso-ayotzinapa/
[iii] https://www.infobae.com/mexico/2024/09/01/no-podemos-vivir-en-paz-en-un-pais-con-mas-de-100-mil-desaparecidos-y-200-mil-personas-asesinadas/
[iv] https://ljz.mx/30/08/2024/se-reportan-1744-personas-desaparecidas-del-2021-al-2024-una-cifra-preocupante/
[v] https://www.tlachinollan.org/amlo-sin-avances-en-el-caso-ayotzinapa/
[vi] https://www.dw.com/es/indignados-la-traici%C3%B3n-de-amlo-a-las-v%C3%ADctimas-de-ayotzinapa/a-68496139
Carlos Hinojosa*
*Docente y escritor zacatecano
