Como bien saben los amables lectores, el estado de Zacatecas se encuentra en medio de una crisis social y política debido a las protestas de los trabajadores de la educación, quienes han expresado su descontento por diversas razones, entre las que destacan el manejo ineficiente del sector educativo, de parte de la administración estatal, así como el olvido y «congelamiento» de las propuestas legislativas de reforma al sistema de pensiones del ISSSTE a nivel federal. Este movimiento magisterial ha puesto en evidencia las tensiones entre la administración del gobernador David Monreal Ávila, y los trabajadores de la educación, quienes exigen respuestas concretas a sus demandas.
No es ningún secreto que el descontento de los trabajadores de la educación en Zacatecas tiene raíces profundas y multifacéticas: en primer lugar, los maestros han denunciado la falta de atención a sus demandas laborales y salariales, que incluyen mejoras en las condiciones de trabajo, prestaciones y pagos atrasados, junto con la falta de diálogo por parte de las autoridades estatales. A esto se suma la percepción de que el gobierno de David Monreal Ávila ha sido indiferente a sus necesidades (peor aún, el empleo de taxistas como grupo de choque contra los docentes que mantienen detenidas las obras del oneroso e innecesario «viaducto elevado»),[i] lo cual ha generado un clima de frustración y desconfianza.
Además, la reciente propuesta de la presidenta Claudia Sheinbaum de reformar la legislación del ISSSTE ha exacerbado el malestar entre el gremio magisterial. El proyecto de reforma, que incluye aumentos en los descuentos a los trabajadores, ha sido vista como un ataque directo a sus derechos laborales y económicos, olvidando por completo las propuestas legislativas ya presentadas para reformar el sistema de pensiones del ISSSTE, como la eliminación de las cuentas individuales y el regreso al esquema del Décimo Transitorio, así como la reducción de la edad de jubilación a 30 años de servicio para hombres y 28 años para mujeres,[ii] demandas que han sido ignoradas en la propuesta actual (pese a que fueron compromisos de parte del poder ejecutivo desde la pasada administración presidencial), lo que ha generado un sentimiento de abandono y traición entre los trabajadores.
Por si fuera poco, el manejo de esta crisis por parte del gobierno estatal ha sido ampliamente criticado: el gobernador David Monreal Ávila y sus colaboradores, como el secretario de gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, y la recién nombrada secretaria de educación, Gabriela Pinedo Morales, han sido acusados de falta de liderazgo y de no establecer un diálogo efectivo con los trabajadores de la educación. En lugar de buscar soluciones concretas, las autoridades han optado por medidas reactivas y de poca seriedad, lo que ha agravado la situación.[iii]
La falta de comunicación y transparencia ha sido un factor clave en el deterioro de la relación entre el gobierno y los trabajadores: los maestros han denunciado que sus demandas no han sido escuchadas y que las respuestas de las autoridades han sido insuficientes y tardías, lo cual ha llevado a un escalamiento de las protestas, con bloqueos de carreteras y movilizaciones masivas en diferentes partes del estado.
Por tanto, es probable que, en los próximos días, las protestas de los trabajadores de la educación se intensifiquen, especialmente a medida que más maestros de otras entidades se sumen al movimiento en rechazo a la citada propuesta de reforma del ISSSTE, entre otras demandas; por ejemplo, ya se ha convocado a una segunda marcha masiva para el lunes 24 de febrero en la capital zacatecana. Para todo mundo resulta obvio (menos para las autoridades competentes) que la falta de respuestas concretas por parte del gobierno estatal y federal podría llevar a un mayor descontento y a una radicalización de las demandas.
Además, como ya se mencionó, la crisis en Zacatecas empieza a tener repercusiones a nivel nacional, ya que el descontento magisterial no se limita a nuestro estado. Si el gobierno federal no toma en serio las demandas de los trabajadores de la educación y no establece un diálogo real y efectivo, es posible que se desaten protestas similares en otros estados del país.[iv]
Por otro lado, la administración de David Monreal Ávila enfrenta un desafío significativo en términos de gobernabilidad: si no logra resolver esta crisis de manera efectiva, podría perder aún más la credibilidad y el apoyo entre la población (proceso que sigue su marcha inexorable, ante sus evidentes fracasos en materia de seguridad, salud y desarrollo económico), lo que tendría implicaciones políticas importantes en el corto y mediano plazo.[v]
Como podemos ver, la protesta de los trabajadores de la educación en Zacatecas es un reflejo de un problema más amplio que afecta a todo el país: la falta de atención a las demandas laborales y sociales de los trabajadores, así como la incapacidad de los gobiernos, de todos los niveles y «colores», para establecer un diálogo efectivo y resolver conflictos de manera pacífica. El manejo de esta crisis por parte del gobierno de nuestro estado ha sido deficiente, y las proyecciones para los próximos días no son alentadoras si no se toman medidas concretas y se establece un diálogo real con el gremio docente.
Resulta imperativo que tanto el gobierno estatal como el federal escuchen las demandas de los trabajadores de la educación y trabajen en soluciones que beneficien a todas las partes involucradas. De lo contrario, esta crisis podría escalar a niveles insospechados, con consecuencias graves para la estabilidad social y política de Zacatecas y del país en general.
[i] https://www.nmas.com.mx/nmas-local/programas/las-noticias-zacatecas/videos/taxistas-confrontan-maestros-por-bloquear-obras-segundo-piso/
[ii] http://sil.gobernacion.gob.mx/Archivos/Documentos/2025/02/asun_4834623_20250212_1739308245.pdf
[iii] https://agendapolitica.net/2025/02/21/david-monreal-le-declara-la-guerra-al-magisterio-zacatecano/
[iv] https://www.laizquierdadiario.mx/Zacatecas-un-ejemplo-de-lucha-que-puede-extenderse-a-nivel-nacional
[v] https://entresemana.mx/codigo-politico-gobierno-sin-rumbo-ni-liderazgo/
Carlos Hinojosa*
*Docente y escritor zacatecano