Como bien saben los amables lectores, el pasado martes 21 de febrero, Genaro García Luna, de 54 años, titular de la Secretaría de Seguridad Pública durante el sexenio del presidente Felipe Calderón Hinojosa, fue declarado culpable, por un jurado federal de Brooklyn, de aceptar sobornos masivos del Cártel de Sinaloa, lo que permitió a Joaquín «El Chapo» Guzmán y a sus socios contrabandear miles de toneladas de cocaína hacia EUA. Pero después de escuchar el testimonio de agentes estadounidenses sobre la policía federal en México, filtrando información sobre las operaciones de la DEA y obstaculizando los esfuerzos para capturar a El Chapo bajo García Luna, cabe preguntarse: ¿era Estados Unidos ajeno a la corrupción mexicana o un cómplice con pleno conocimiento de causa?
El juicio de García Luna duró casi un mes y fue tan notable por lo que se dijo en la sala como por lo que se ignoró. A diferencia del proceso contra El Chapo —que tuvo lugar ante el mismo tribunal, juez y testigos—, el caso de García Luna apenas recibió atención de los medios de comunicación estadounidenses, lo que no fue el caso de México, donde el presidente, Andrés Manuel López Obrador, se aseguró de que el juicio fuera noticia de primera plana, a medida que el testimonio de los testigos planteaba más preguntas sobre su propia presunta vinculación con la corrupción del cártel de Sinaloa.[i]
En virtud de tales cuestiones sin respuesta, presentamos a nuestros lectores el análisis de Gavin Voss, de la prestigiosa y certera fundación InSight Crime, aparecido el 22 de febrero, sobre tan controvertido proceso judicial.
García Luna fue condenado, pero sospechas de corrupción persisten en alianza EE. UU.–México, por Gavin Voss, 22 de febrero de 2023.[ii]
La condena al exsecretario de seguridad pública de México, Genaro García Luna,[iii] por narcotráfico y corrupción, representa una complicada victoria para las autoridades estadounidenses, en cuanto que a la par pone de relieve la intolerancia por los aliados corruptos, y revela los retos de mantener ese compromiso.
La condena de García Luna por todos los cargos fue la culminación de una investigación y un proceso judicial arduo y prolongado por parte de las autoridades estadounidenses, quienes acusaron[iv] a García Luna de aceptar «mordidas» multimillonarias de las cabezas del Cártel de Sinaloa[v] así como de su antiguo aliado y actual enemigo, la Organización Beltrán Leyva, a cambio de proteger a los narcotraficantes de la acción de las autoridades y de entregarles información de inteligencia sobre grupos rivales.
Los narcotraficantes rindieron algunas de las declaraciones más explosivas contra García Luna, quien, durante su función como titular de la Secretaría de Seguridad Pública, entre 2006 y 2012, se consideró un estrecho aliado de Estados Unidos en la guerra antinarcóticos. Jesús Zambada, alias «El Rey», hermano del líder del Cártel de Sinaloa, Ismael Zambada, alias «El Mayo»,[vi] aseguró haber entregado múltiples pagos en efectivo a García Luna, en persona, y a la mano derecha de éste, Luis Cárdenas Palomino. Otro narcotraficante, Óscar Nava Valencia, alias «El Lobo», exjefe del Cártel Milenio y aliado cercano del de Sinaloa, repitió las acusaciones de Zambada, alegando que él también hizo pagos directos a García Luna. «Le entregué dinero en efectivo […] Fueron más de 10 millones de dólares», testificó.[vii]
La abundancia de testimonios sensacionales contrastó con la relativa falta de evidencias sólidas que apoyaran los argumentos de la fiscalía sobre las presuntas actividades criminales de García Luna, cuyo abogado, César de Castro, recalcó dicho punto a lo largo del juicio, argumentando que no había «dinero ni fotografías ni videos o textos ni mensajes de correo electrónico o grabaciones y documentos… ninguna evidencia creíble, verosímil» sobre la cual condenar a García Luna.
La fiscal estadounidense, Erin Reid, contraargumentó que los testimonios de los testigos constituía evidencia concluyente de las actividades de García Luna, a pesar de que gran parte de estos provinieran de criminales convictos. «Podemos elegir un grupo de maestros de escuela para atestiguar, pero los maestros de escuela no dirigen carteles internacionales de drogas», repuso Reid durante los argumentos finales del juicio. «No se necesita una interceptación ni un video o una llamada telefónica. Tenía la mejor evidencia: las personas que le pagaron».
Análisis de InSight Crime
La condena de García Luna manda un claro mensaje del compromiso de Estados Unidos con la lucha contra la corrupción, aún entre las más altas instancias de sus aliados en las instituciones de seguridad y policía de México. Pero el proceso también pone en evidencia algunos obstáculos de mayor envergadura que enfrentan las autoridades estadounidenses al tratar de enfrentar tal problema.
La falta de evidencias sólidas es una característica de muchos casos de corrupción, y fue especialmente prevalente en el caso de García Luna. La interceptación de conversaciones, la obtención de videos y mensajes o el hallazgo de rastros documentales de los sobornos son todas tareas de la mayor dificultad, más aún cuando el objetivo es un oficial de orden público que conoce los trucos del oficio.
Otra dificultad puede ser mantener un balance entre la lucha anticorrupción y la necesidad de mantener la cooperación junto con la confianza entre aliados cercanos para apoyarse en las operaciones antinarcóticos.
David Shirk, director del programa «Justicia en México», de la Universidad de San Diego, declaró a InSight Crime que la buena reputación de García Luna y su relación con los aliados del norte durante su periodo en la Secretaría de Seguridad pueden haberlo blindado del escrutinio.
«La razón por la que no tenemos la evidencia es que en ese momento no la estábamos buscando —comentó Shirk—. Estábamos tan cautivados con García Luna hace una década o más que nadie cuestionaba seriamente su integridad ni trataba de recabar evidencia en su contra».
Las consideraciones diplomáticas también han sido un reto para la labor de las autoridades estadounidenses en la investigación de casos de corrupción contra sus aliados mexicanos.
El actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, más conocido como AMLO, tenía pocos incentivos para dar blindaje político a García Luna, quien había servido durante la administración del expresidente mexicano Felipe Calderón, su opositor político.
Por otro lado, la administración de AMLO ayudó a eludir un intento de EUA de procesar judicialmente a Salvador Cienfuegos,[viii] exsecretario de defensa mexicano, quien en 2020 fue acusado de narcotráfico y lavado de activos. La presión del gobierno de AMLO, que logró la liberación de Cienfuegos de la custodia estadounidense y su retorno a México, se derivó en parte del deseo de AMLO de preservar una relación conveniente en términos políticos con las fuerzas armadas mexicanas.
Cálculos políticos similares seguramente afectarán la voluntad de México de cooperar con futuras tentativas estadounidenses de procesar a actores corruptos en las fuerzas de su aliado, encargadas de combatir el crimen, comentó Dan Schneider, profesor asistente en la Escuela de Servicio Internacional de la American University y exfiscal del Departamento de Justicia estadounidense.
«No sé cuánto los envalentone esto. Creo que la cuestión central para ellos sigue siendo, ¿habrá interferencia política?», fue la reflexión de Schneider en intercambio con InSight Crime. A pesar de la importancia simbólica de la condena de García Luna, su efecto perdurable en las iniciativas anticorrupción de las autoridades estadounidenses puede ser menos profundo.
El artículo original puede leerse en https://es.insightcrime.org/noticias/garcia-luna-condenado-sospechas-corrupcion-persisten-eeuu-mexico/
[i] https://politica.expansion.mx/presidencia/2023/01/19/amlo-cartel-de-sinaloa-cuatro-anos-de-cartas-saludos-y-una-relacion-polemica
[ii] https://es.insightcrime.org/noticias/garcia-luna-condenado-sospechas-corrupcion-persisten-eeuu-mexico/
[iii] https://es.insightcrime.org/noticias-crimen-organizado-mexico/genaro-garcia-luna/
[iv] https://www.justice.gov/usao-edny/press-release/file/1299686/download
[v] https://es.insightcrime.org/noticias-crimen-organizado-mexico/sinaloa-cartel-perfil/
[vi] https://es.insightcrime.org/noticias-crimen-organizado-mexico/ismael-zambada-garcia-el-mayo/
[vii] https://elpais.com/mexico/2023-01-30/el-lobo-valencia-declara-que-pago-sobornos-a-garcia-luna-fueron-mas-de-10-millones-de-dolares.html
[viii] https://es.insightcrime.org/noticias/analisis/arresto-exministro-defensa-mexico/
Carlos Hinojosa*
*Escritor y docente zacatecano