Con un presupuesto ya listo para ejercerlo a partir del primero de enero, el Gobierno del Estado ya no tiene tiempo para pretextos, ni para culpar al pasado, solo tiene el presente, que ya debe ser de preparativos para iniciar con el cierre de programas, pero con resultados, porque se trata del quinto año de gobierno y el plazo de acaba, afirmó el presidente del PRI, Carlos Peña Badillo.
Aunque de los 42 mil millones de pesos que le autorizó el Congreso del Estado y a pesar que hay rubros evidentemente dirigidos para el proselitismo político, como el presupuesto del DIF, el año 2026 será un año de gasto muy observado, no solo por las instancias de contraloría, sino por los propios partidos políticos que estarán atentos para demandar posibles actos anticipados de campaña y uso de recursos públicos. Hay suficiente presupuesto, pero no espacio para los pretextos, agregó Peña Badillo.
En entrevista radiofónica el presidente del PRI consideró que el reto para las autoridades es realmente formidable, porque hasta hoy avanzan con muchos rezagos, con pocos resultados concretos y varias políticas públicas, como la educativa y la de salud, que han sido muy erráticas.
Refirió Peña Badillo que el Grupo Parlamentario del PRI en la LXV Legislatura votó a favor la propuesta de presupuesto 2026, con una partida muy importante para la Secretaría de Educación, para que ya resuelva los problemas de pago de los maestros y así se terminen las marchas y plantones que tan daño causan a la población en general. En este mismo sentido está el presupuesto para la Secampo, que además deberá estar acompañada por las autoridades para gestionar los apoyos federales ya convenidos con los productores y evitar así los bloqueos de carreteras.
Es cierto, dijo Carlos Peña, que los zacatecanos reprueban el ejercicio del presupuesto del gobierno estatal, porque no hay resultados medibles, pero también rechazan que no se haya encontrado una vía de acuerdo con el gobierno federal para que cumpla en programas específicos como la entrega de medicamos y apoyo a hospitales, recursos para carreteras y compromisos con el campo zacatecano.
A nivel federal y estatal no han encontrado la fórmula para estimular el empleo, la inversión y el turismo y, por lo mismo, la economía sigue estancada y las oportunidades de trabajo simplemente no llegan. Por eso afirmamos que votar a favor el presupuesto 2026 es un llamado para que ya se acaben los pretextos y se inicie el próximo año con las mejores intenciones, por el bien de todos los zacatecanos, concluyó Peña Badillo.