♦️ Xerardo Ramírez levanta la mano para ser diputado local por el Partido del Trabajo
♦️ Legislará a favor del desarrollo de los jóvenes y el empoderamiento de las mujeres
Definido como un político más maduro y más sensible, Xerardo Ramírez Muñoz levantó la mano para intentar regresar a la máxima tribuna del estado, ahora con la bandera del Partido del Trabajo (PT) al frente.
Luego de 10 años de haber ocupado un espacio en la LX Legislatura de Zacatecas, en ese entonces por las siglas del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), ahora buscará ir de la mano del proyecto D-21.
Confiado en que puede vencer a dos ex presidentes municipales, Xerardo Ramírez está consciente de que en esta elección atípica habrá mucha guerra sucia, ataques y calumnias por parte de los adversarios, pero le apuesta a que, independientemente de quiénes sean los candidatos, sobresalgan las propuestas.
Orgulloso de su trayectoria de más de 20 años en la política, tiempo en el que ha madurado y se ha sensibilizado frente a las necesidades sociales, se proclamó como un “antipriísta” de toda la vida.
“Fui simpatizante del PRD en el 98, soy antipriísta, toda mi vida he sido antipriísta. Me gustó competir contra el PRI en 2013, y aunque no soy político de partido, tengo una visión muy clara de que con cualquiera, menos con el PRI”, externó a Trópico de Cáncer Noticias.
Xerardo Ramírez ve en Ricardo Monreal el modelo de político que no es de partidos, sino de causas, ya que ha estado en el PRI, en el PT, Movimiento Ciudadano y en otras expresiones, hasta llegar a Morena. “Soy de la idea de que no se necesita enfocarse en un partido para promover causas sociales”, asentó.
A pregunta expresa de cómo quitar la etiqueta a los “chapulines”, el neomilitante petista afirmó que la única forma es cumpliendo. “La gente sigue confiando en Ricardo, la gente confía en él porque cumple, él se compromete y él cumple, y a la gente no le importa si él es perredista, priísta, de Movimiento Ciudadano, del PT o ahora de Morena”.
Por ello, Xerardo Ramírez decidió sumarse al movimiento D-21, que encabeza David Monreal, a quien calificó como un hombre muy preparado, con muchas tablas, con mayor madurez, con un proyecto muy definido y con ganas de demostrar a Zacatecas que se pueden hacer bien las cosas.
A David Monreal se le han sumado políticos que, aunque no son nuevos, quieren demostrar que se puede cambiar el rumbo del estado, como Julio César Chávez, Priscila Benítez, Cuauhtémoc Calderón o Norma Julieta del Río, entre otros.
Xerardo Ramírez ve en Claudia Anaya Moya a una mujer luchadora, tenaz y una de las mejores legisladoras de Zacatecas, pero que representa al viejo régimen, el que le ha dado vuelta, ha gobernado al estado en los últimos años y no ha dado resultados.
Sabe que esta elección será un gran reto para todos los contendientes, puesto que será muy corta y se vivirá, atípicamente, en medio de una pandemia, pero está motivado en que, llegándose los tiempos para competir, demostrará su experiencia en los temas legislativos.
Xerardo Ramírez visualiza que hay mucho por hacer en temas como la inclusión de las personas con discapacidad, de los grupos indígenas y de la comunidad LGBT, así como promover la creación de empleos entre los jóvenes, así como el empoderamiento de las mujeres en los ámbitos político y laboral.
Para el político de 37 años, se requieren diputados que atiendan y escuchen a la gente en las puertas del Congreso, pero que, asimismo, regresen a las colonias, barrios y comunidades para conocer las necesidades de la ciudadanía y resolverlas.
Ramírez Muñoz ve que la Legislatura tiene la oportunidad de ayudar a que Zacatecas esté más vigilado y sea más seguro, que se promueva la igualdad sustantiva entre hombres y mujeres, y que, por trabajos iguales, se paguen los mismos salarios.
Para la generación de empleos, añadió, se necesita que quienes estén en los puestos de Gobierno de primer nivel sean zacatecanos, puesto que en el estado hay muchos profesionistas capaces de conocer y acompañar los proyectos para que tengan éxito y, en consecuencia, no haya fuga de talentos ni mano de obra a otros estados.
Xerardo Ramírez recordó que, en el periodo que estuvo como diputado, se impulsó la Ley de Desarrollo Metropolitano, la incorporación de jóvenes y mujeres en las candidaturas a puestos de elección popular, pero ve con tristeza que muchas iniciativas más quedaron en el tintero.
Al levantar la mano para contender por el Distrito 1, afirmó que quiere ser un político y un legislador profesional, con ímpetu de poner en práctica la experiencia obtenida al desempeñarse durante cuatro años como director de Comercio Interior en la Secretaría de Economía de Zacatecas (Sezac).
Desea ponerse en los zapatos de los jóvenes que, como él, se las han visto duras para terminar sus carreras y, aún más, continuar su preparación. También, en las acciones de reforma política constitucional, considera necesario que en las elecciones de las presidencias municipales también se elija a las síndicas, síndicos, regidoras y regidores.
Con orgullo, Xerardo Ramírez resume su formación en Relaciones Internacionales, Mercadotecnia, Publicidad e Imagen Pública, vive de impartir clases en distintas universidades, así como asesorías en otras partes del país.
Afirmó a Trópico de Cáncer Noticias que no tiene nada qué esconder, y así lo demuestran sus declaraciones patrimoniales públicas, no buscar ser un legislador de lujos ni excentricidades, tampoco le interesa vivir en los grandes fraccionamientos ni cuenta con ranchos ni propiedades en otras partes del mundo.
“No puedo ser un legislador de lujos habiendo un pueblo pobre, el dinero que sea para la gente, llegará a la gente. No quiero ir al Congreso para hacerme millonario, no me interesa…”, remató Xerardo Ramírez.
Redacción / Tropicozacatecas.com
